SOBRE LA MARCHA Te lo juro por dios
Te
juro por dios que no hay quien ande fuera de nuestras calles. Vi unas medias negras
colgadas de la rama de un árbol. Quien se las dejara ahí y el porqué, será
motivo de otra de nuestras grandes discusiones y de alardes imaginativos, pero
la verdad nunca la sabremos. Nunca. Y no será porque no nos mueve la curiosidad.
Todas las personas que pasaban se quedaban mirando como si fuera la obra de un
artista puesto, subrepticiamente, para sorprender al paseante. Tal y como se
concibe ahora todo tipo de arte. Sorprender. Y las caras denotaban todo tipo de
pensamientos desde la risita picarona, pasando por la mueca de extrañeza y
terminando por la cara más desagradable de desaprobación de ¡adónde vamos a ir
a parar! Lo que parecía claro es que a nadie le resultaba indiferente y el
artista debería de estar satisfecho por eso. No pienso en los comentarios
jocosos unos, sutiles otros. Unos verdes y otros inocentes. No, en eso no
pienso cada uno con los suyos. Pero sí pienso lo que pueden dar de sí, en este
caso, unos pantys colgados de un árbol en un parque o lo que es lo mismo, lo
que puede dar de sí cualquier cosa desubicada de su sitio natural. Un tipo en
bañador por la Gran Vía es claro que todo el mundo le miraría con extrañeza y
ese mismo tipo en la playa es uno más. O ese mismo tipo desnudo en una iglesia.
¡Vaya! O tres curas en una fiesta gay: ¡Joder! O cuatro monjas vestidas de
monjas en la zona ultra de un campo de fútbol con sus gorras y bufandas
agitándolas cantando el himno del equipo y llamando de todo a los contrarios o
al árbitro. ¡Jeesús!. Un banquero generoso, ¡coñóooo! o un político incorrupto,
¡Y una mierda!…Y por lo que tiene de extraño, parece que todo tiene que tener
una lógica también en lo que atañe a los sentimientos. Los bañadores para las
playas o piscinas. Los curas en sus iglesias y las monjas guardándoles o
rezándonos. Hemos sido nosotros durante generaciones los que hemos construido
esta lógica, o a lo que llamamos lógica y cuando nos desubicamos o se desubica
algo parece como que entramos en una locura personal o incluso colectiva de la
cual se auto alimenta el más energúmeno. Este pensamiento que puede parecer
poco ilógico, solo se fundamenta en mi razón muy discutible por supuesto.
Me
fijé un poco más en ellas, en esas dos tiras negras colgantes, con ojos de
inspector Maigret. Afortunadamente no parecían haber sido arrancadas
violentamente. Tampoco parecían muy sucias a pesar de que el aparcamiento que
había pegado al árbol era de tierra y había obras en el lugar: polvo, barro,
humo de coches...Tampoco tenían etiqueta para decir que fueran nuevas pero no
llevarían más de dos o tres piernas puestas. Como si fueran nuevas. Era
sencillamente un mal adorno, de muy mal gusto o un adorno extravagante para un
árbol al que pronto le iban a vestir con las bolitas o las lucecitas de la
festividad de, te lo juro por dios que ha vuelto a nacer el niño dios, te lo
juro por dios...
Relato surrealista como la vida misma
ResponderEliminarReflexión acerca del absurdo orden que el ser humano necesita para sentirse feliz o estable emocionalmente .Nos acostumbramos a las noticias de dolor en los telediarios y a la imagen de los pobres pidiendo en una ciudad .
ResponderEliminarErrata anterior .Es un relato subrealista como la vida misma .
ResponderEliminarLo que mas me ha sorprendido es como empiezas : " Te lo juro por Dios " una frase muy manida y muy destructiva .la has utilizado con toda la intención para ridiculizar mas la situación , Para humillar mas a las personas que no ven más allá de lo que les dicen o les imponen .Ir por la vida como borregos ,acatando y obedeciendo sobre todo si lo dicen en nombre de Dios.
ResponderEliminarPerdona Maribel pero subrealista es la errata. Esta palabra no está aceptada por la RAE
ResponderEliminar